El Gobierno de Luis Lacalle Pou modificó la forma de calcular el Impuesto A La Renta De Las Personas Físicas (IRPF), del índice de precios al consumo, el que mide la inflación, al índice medio de salarios. Esto significó un aumento de la recaudación de 50 millones de dólares. Lo mismo ocurrió con el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS), por el cual sumó 15 millones de dólares.
Este impuesto se calcula con las bases de prestaciones y contribuciones (BPS), que se ajustó anualmente en base al incremento de precios. Es decir que si los salarios crecían por encima de la inflación, se destinaba menos salario al pago de este impuesto. Con la modificación y el crecimiento de los precios, ocurre lo contrario.
El aumento acumulado de la inflación en los dos últimos años es de 18,1%, notificó Santiago Soto en una columna para La Diaria, publicada este lunes 27.
Por otra parte, los salarios aumentaron por debajo, un 14,3%.
La decisión gubernamental tiene incidencia en la cantidad de personas que pagan IRPF: “a partir del ajuste de enero de 2021, el Poder Ejecutivo definió cambiar este criterio, por lo que las franjas del IRPF gravaron ingresos más bajos que si se hubieran mantenido sus valores en términos de precios”, indicó Soto.