En términos de gestualidad política, es muy extraño. Sería casi descortés, dijo el analista Agustín Canzani en M24. "Es un gesto que hay que interpretar políticamente", porque "todo indica que si el trunfo de Lula se consolida en Brasil, se van a revitalizar algunas arenas internacionales", con una OEA que se queda sin sus grandes apoyos en latinoamérica.
"Uno podría decir que si se considera amigo de Duque, que lo vaya a saludar cuando deja su mandato podría ser razonable; que no vaya a la asunción de Petro es lo que no suena demasiado razonable ni parece estar justificado por se un destino lejano o tener agenda muy cargada".
Casi pasa lo mismo con la asunción de Gabriel Boric en Chile, que al final fue. Esos gestos también tienen consecuencias.
Colombia es un país relevante en términos económicos que superó poblacionalmente a Argentina. Sería interesante ver qué responde el presidente Lacalle Pou por qué hace una cosa y no la otra.