En siete jornadas y vía internet, la Anep busca que los 290 inspectores de primaria sean tutores de los 4.000 directores de escuelas de cara a la reforma educativa que comenzará a correr en 2023. Pero 30 inspectores buscan renunciar a los cursos. La consejera Daysi Iglesias mostró su respaldo, destacó su valentía y aseguró que los inspectores están haciendo uso de su libertad de conciencia.
La consejera del Codicen, Daysi Iglesias, respaldó a los 30 inspectores de escuelas que solicitaron bajarse de los cursos virtuales porque entienden que las condiciones de formación y capacitación no son los pertinentes para trabajar en el marco de la transformación educativa, que comenzará en 2023.
En un video publicado en su cuenta de Youtube, explicó que los inspectores son un grupo muy específico de profesionales de la educación, fácilmente identificables (hay unos 290, cuando hay casi 4.000 directores y miles de maestros), con una vinculación muy directa con las autoridades de la educación.
“Por tanto, para dar este paso tienen que haber tenido importante reflexión y mucho de valentía”, comprendió la consejera.
Iglesias entiende que esta posición es válida porque está dentro de la libertad de conciencia: “no puedo dictar un concurso para el cual a mí no se me dieron elementos”.
“Es muy importante lo que ellos dicen, que ni siquiera están prontos los planes y programas que recién estarán en 2024”, informó en su alocución, luego de leer la carta que los inspectores remitieron a la Asociación de Maestros del Uruguay, para solicitar amparo ante posibles consecuencias.
La respuesta del presidente de la Administración Nacional de Educación Pública, Robert Silva, sin conocer la carta que enviaron, fue tajante: “no se va a bajar nadie” porque la participación en este tipo de instancias es una obligación inherente al cargo de inspector. Dijo a la prensa que se estudiarán posibles sanciones.