Intercediendo por Argentina ante el FMI, reclamando reformar la división de poder en los organismos internacionales y afianzando las relaciones bilaterales con India, el presidente Lula da Silva evidenció en la cumbre del G7 en Hiroshima la reactivación del liderazgo de Brasil a nivel global tras el oscuro interregno que sufrió el país bajo el mandato de Jair Bolsonaro.
Lula advirtió este sábado 20 que la deuda externa con las condiciones impuestas por el Fondo Monetario Internacional (FMI) “destroza” a Argentina e intercedió a favor del gobierno de Alberto Fernández ante la directora general del organismo, Kristalina Georgieva, durante su participación como invitado en la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón.
El gobierno de Brasil informó que Lula le dijo a Georgieva que la situación económica argentina es clave en el “equilibrio regional” de Sudamérica. “La situación de Argentina fue el principal tema de la reunión entre Lula y la titular del FMI, que duró 30 minutos”, dijo a la agencia argentina Télam una fuente de la delegación brasileña, según el portal cooperativo Infonews.
El G7 nuclea a Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, Italia, Reino Unido y Japón. El gobierno argentino negocia con el directorio del FMI a fin de que el organismo adelante los desembolsos previstos para el resto del año según el programa de Facilidades Extendidas, acordado por la deuda de US$ 45.000 millones contraída durante el gobierno de Mauricio Macri.
“El endeudamiento externo de muchos países, que victimizó a Brasil en el pasado y hoy destroza a Argentina, es causa de una flagrante y creciente desigualdad, y requiere un tratamiento del FMI que considere las consecuencias sociales de las políticas de ajuste”, afirmó Lula durante el primero de sus dos discursos en la sesión plenaria de la cumbre del G7.
Lula también pidió la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU con mayor representación y defendió “la consolidación del G20”, que desde la crisis estadounidense de 2008 amplió la participación a países emergentes.
Además reclamó compensaciones económicas a los países en vías de desarrollo por preservar los bosques, y anunció que buscará una salida multilateral en la lucha contra el cambio climático reuniendo a la República Democrática del Congo y a Indonesia, que con Brasil poseen el mayor territorio de selvas del planeta. Brasil posee el 60% de la selva amazónica.
Lula: Brasil e India son países de la mayor importancia para el diseño de una nueva geopolítica global
Asimismo, en el marco del evento, Lula y el primer ministro de la India, Narendra Modi, acordaron afianzar sus relaciones bilaterales, informó el canal latinoamericano Telesur. Analizaron la asociación estratégica de los dos países y examinaron vías para fortalecerla, principalmente en sectores de producción de defensa, comercio, productos farmacéuticos, agricultura, lácteos y ganadería, así como en biocombustibles y energía limpia.
Modi dijo que India y Brasil no son “países neutrales” en el conflicto entre Rusia y Ucrania, sino países interesados en mantener la paz en el mundo. Habló de su interés en trabajar con Brasil en la búsqueda de una solución pacífica. Luego de la reunión, Lula tuiteó: “estamos del lado de la paz”. A diferencia de los países del G7, India y Brasil no avalan sanciones a Rusia.
“Países de mayor importancia para el diseño de una nueva geopolítica global”, afirmó Lula. India es el quinto mayor socio comercial de Brasil. En 2021, el comercio común alcanzó el resultado más alto de la historia: 15.100 millones de dólares. Brasil exportó por valor de más de 6.000 millones a India e importó 8.800 millones de dólares en productos indios.