De la reciente interpelación del diputado frentista Nicolás Viera a los ministros de Economía y de Relaciones Exteriores por el caso de Salto Grande, salieron debilitados el presidente de la República y el secretario de la Presidencia mientras que se fortalecieron la oposición y el partido liderado por el senador Guido Manini Ríos, analizó el director de Factum, Eduardo Bottinelli, en INFO 24.
Bottinelli señaló que “en este caso particular” de la última interpelación, “si bien (el núcleo duro del gobierno) sale con el respaldo de los ministros, las declaraciones que se realizaron por parte de los socios de la coalición fueron más duras que lo que pasó por ejemplo con (el ministro de Interior, Luis) Heber”.
Precisó que en aquella oportunidad “quizás el voto disonante de Cabildo Abierto (CA) fue fuerte pero hubo una defensa del Partido Nacional (PN) y el Partido Colorado (PC) a lo actuado; en este caso no, en este caso hubo miradas críticas desde adentro del PN y desde adentro del PC, además de CA, en sus declaraciones”.
“Sale fortalecido el Frente Amplio (FA), que pone el tema arriba de la mesa, lo discute y logra resultados; hay que ver qué decisión final toma la delegación de Salto Grande y el presidente de la República, pero sin duda la declaración final fortalece al FA”.
Asimismo, “después aparece el rol de CA, que claramente está mostrando que sus votos pesan, que tanto con la Rendición de Cuentas como fue en la interpelación a Heber como en esta interpelación a (Azucena) Arbeleche y (Francisco) Bustillo, CA no solamente muestra una mirada más crítica de lo que ha sido el gobierno sino que además muestra que sus votos valen”, recalcó.
Por el contrario, “termina golpeado, por un lado, el sector del presidente y de Álvaro Delgado”, esto es Aire Fresco (lista 404 del PN), así como sale golpeado “el sector de (el senador colorado salteño Germán) Coutinho; y eso tiene mucho que ver con cómo se armó la integración de la delegación de Salto Grande”, apuntó.
“Si uno concentra el poder básicamente en dos sectores, uno del PN y otro del PC, deja afuera a una parte relevante de los propios partidos y sobre todo de socios o de la oposición”, advirtió.
“Y la concentración de poder tiene costos cuando suceden estas cosas; lo que hay que ver hacia adelante es cómo sigue esto, si finalmente renuncian estos cargos (…), qué pasa con las autoridades de la delegación de Salto Grande, y hay distintas consecuencias que hay que mirar cómo evolucionan”; explicó:
“Por un lado, a nivel nacional, desde el presidente, de Álvaro Delgado, de Coutinho, pero hay otro que es qué pasa en Salto, porque en Salto terminan siendo golpeados el principal candidato de lo que podía ser una coalición departamental, y el segundo principal candidato, es decir (Carlos) Albisu y Coutinho”.
“Lo que hay que ver es si esto termina siendo un golpe final o muy fuerte en su imagen, o todavía hay tiempo de recuperación teniendo en cuenta que falta un año y medio para las elecciones departamentales”, analizó el director de la consultora Factum.