El ministro de Defensa Nacional, Javier García, sostuvo que la finalidad es disuadir, comunicar la protección del espacio aéreo uruguayo, "y que no es un festín para el narcotráfico y el crimen organizado". La decisión del derribo la debe tomar el presidente.
A la salida de los acuerdos ministeriales, el titular de Defensa, Javier García, informó que la normativa la reglamenta la Ley de Urgente Consideración (LUC) y que ésta determina las condiciones de irregularidad de una aeronave y las doce circunstancias que pueden identificarse de ese modo dentro del espacio aéreo.
Las acciones incluyen disuasión, comunicación, identificación y acompañamiento, así como a la neutralización del vuelo hostil, como último paso.
“Lo que pretende es que se sepa que nuestro espacio aéreo está protegido, que no es un festín para el narcotráfico y el crimen organizado, que elige rutas uruguayas porque hay leyes de derribos en los países de la región. Ahora acá también existe un protocolo de acción para la Fuerza Aérea”, subrayó.