Este martes adherentes y detractores del presidente Jair Bolsonaro marchan en el aniversario de la independencia del país, en el marco de una tensión política y social.
Los seguidores del presidente Jair Bolsonaro anunciaron que defenderán en las calles "la libertad de expresión" y pedirán "una nueva independencia", en respaldo al enfrentamiento del mandatario con la Corte Suprema, que investiga a blogueros y políticos de su entorno por la divulgación de fake news.
Bolsonaro, que participará de las movilizaciones en Brasilia, señaló que las marchas de este martes son un "ultimátum" para "uno o dos" de los jueces del Tribunal Supremo Federal.
Los sectores opositores también se movilizarán. El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva alertó que el actual presidente "estimula la división y el odio".
Días atrás líderes progresistas firmaron un comunicado en el que advierten que Bolsonaro "ha intensificado sus ataques en contra de las instituciones democráticas de Brasil en las últimas semanas", y alertaron por un posible Golpe de Estado. Entre los firmantes están los exmandatarios José Luis Rodriguez Zapatero de España, Fernando Lugo de Paraguay, Ernesto Samper de Colombia y Rafael Correa de Ecuador.
El profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Federal do Ceará (Fortaleza), Clayton Mendonça Cunha Filho, dijo al programa 'Telescopio' (Sputnik) emitido por M24 que "no sería novedad" que la tensión política derive en un Golpe.
"Es el plan del presidente Bolsonaro desde el día uno, y desde antes de ser candidato. Cuando era diputado, todo lo que hizo fue alabar la dictadura, no es novedad", explicó. Sin embargo, Bolsonaro cuenta a su favor con el apoyo de las fuerzas policiales estaduales
"Es difícil que haya un golpe directo, una toma de poder, pero los que respaldan a Bolsonaro, en el calor del momento, pueden entrar a la Corte Suprema o al Congreso. Y ahí surgen las dudas: ¿las fuerzas policiales sacarían a esa gente de ahí, se amotinarán o qué pasaría?", se preguntó Mendonça Cunha Filho.
Por su parte, el sociólogo y doctor en Ciencias Políticas Miguel Serna dijo que cuando Bolsonaro habla del Ejército "no solo es una cuestión discursiva, son efectivamente los que están gobernando”
Sobre las manifestaciones de oficialismo y oposición, dijo que el 7 de septiembre "es una disputa entre esas dos tradiciones populares: Bolsonaro, que sigue queriendo demostrar que tiene apoyo, y esta vuelta al juego de Lula, que encarga la tradición trabalhista y la organización partidaria”, sintetizó.
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