“Quienes la torturaron y asesinaron, quienes la enterraron, sabían que este cuerpo pertenecía a Amelia y aun así, de forma cobarde, decidieron continuar callando”, expresó Alba González este martes 28 en conferencia de prensa. “Hoy siguen callando, siguen manteniendo a nuestros familiares secuestrados, siguen ejerciendo su odio y su miedo”, subrayó para finalizar: “por eso hoy volvemos a exigir que nos digan dónde están”.
“Pude”. Así cerró su participación en la conferencia sobre la identificación de los restos hallados la integrante de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos en Uruguay, Alba González.
Lo dijo a Graciela Montes de Oca, la otra representante de la organización presente en la mesa. A Alba, madre de Rafael Lezama (secuestrado en Argentina en 1976), después de hacer un breve racconto de la vida de Amelia Sanjurjo Casal, identificada este martes 28 de mayo.
“La Pocha”, como le decían a Amalia, nació en 1936 y tenía 40 años cuando la secuestraron. Vendedora de libros, dedicó su militancia y “fue consecuente con ella hasta el final”, destacó Alba. Amelia fue secuestrada en la vía pública el 2 de noviembre de 1977 y sus restos óseos fueron descubiertos en la trinchera 405 del Batallón 14 de Toledo.
“Recién hoy podemos darle un nombre. Hoy, Amelia vuelve a su casa, a su familia y a su pueblo”.
“Fue secuestrada incluso después de que se recuperaron sus restos. Sus victimarios continuaron secuestrándola. Cuánto más fácil hubiese sido todo si quienes tenían la información la entregaban”, prosiguió.
Quienes la torturaron y asesinaron, quienes la enterraron, sabían que este cuerpo pertenecía a Amelia y aun así, de forma cobarde, decidieron continuar callando. Hoy siguen callando, siguen manteniendo a nuestros familiares secuestrados. Siguen ejerciendo su odio y su miedo. Por eso hoy volvemos a exigir que nos digan dónde están”.
“Reafirmamos nuestro compromiso eterno con la búsqueda de nuestros seres queridos. Por memoria, verdad y justicia. Hoy Amelia vuelve a su hogar”, finalizó González.
Los restos óseos son de Amelia Sanjurjo, fiscal Perciballe solicitará la reapertura del caso