El cierre de la fábrica de Minas programado por Fábricas Nacionales de Cerveza fue suspendido en el marco de tratativas con el gobierno y el sindicato, de lo que el presidente de la Federación de Obreros y Empleados de la Bebida, Fernando Ferreira, habló en INFO 24.
Ferreira explicó que desde ahora se abren dos mesas de trabajo entre las partes, una que analizará algunos factores económicos y otra que evaluará otros como el laboral, que incluye 150 puestos efectivos.
Al preguntársele si la suspensión del cierre y la apertura de unas negociaciones evidencian que la compañía apostó a tensar al gobierno para obtener algún beneficio, el dirigente sindical indicó que “algo de eso hay (…) es un poco la sensación que queda”.
“Desde mi punto de vista personal creó que sí, que algo de eso hay”, recalcó, y recordó en ese sentido que “hasta el 30 de abril de este año veníamos trabajando de manera normal”, con “ambas plantas operativas” y “con la cantidad de gente que las mismas tienen”.
“Había un anuncio de seguro de paro por parte de la empresa para los meses de mayo primero -tanto la línea de cerveza de Montevideo como la de Minas-, después se sumó junio, pero no había decisión, o no se avizoraba en el horizonte, una posibilidad de cierre”, precisó.
A continuación, el entrevistado añadió al respecto que “hemos escuchado a la Cámara de Industrias, a su presidente también, decir que esto es un escenario que se tenía hace tiempo; se ve que en algunas conversaciones intra-Cámara de Industrias había alguna posibilidad o alguien sabía ya que esto se estaba manejando”.
“Estas decisiones no se toman de un día para el otro, se conversa mucho en las multinacionales porque son decisiones que vienen de otro país; en el caso acá de Uruguay depende de Brasil, la matriz que maneja América, y yo creo que gran parte del mundo, está en San Pablo, más allá de que el grupo es una multinacional, de las primeras cerveceras del mundo, que tiene también Bruselas, Nueva York”.