Haití ingresó “desde hace más de una semana en una nueva fase en ese espiral de violencia marcado por lo que caracteriza la descomposición del sistema neocolonial”, advirtió el activista Henry Boisrolin, integrante del Comité Democrático Haitiano en Argentina, en entrevista con el periodista Carlos Aznárez y publicada por el canal latinoamericano Telesur.
Boisrolin explicó que “hace dos o tres años el pueblo viene sufriendo el accionar tremendo de bandas armadas. Son francamente escuadrones de la muerte, que constituyen instrumentos en manos de la oligarquía haitiana y de la comunidad internacional, principalmente de los Estados Unidos”.
Esas bandas armadas son usadas “para doblegar el movimiento popular haitiano, sembrar el terror, evitar el levantamiento, y en un tiempo que ellos habrán de evaluar, organizar elecciones. Buscando imponer el estatus quo a través de los comicios. Ese es el plan. Ahora, resulta que buena parte de la policía haitiana y el gobierno son funcionales, cómplices y corresponsables de masacres, de quemas de barrios, violaciones, secuestro”, denunció.
En ese país antillano “hay gente que ha decidido reaccionar. Como muchos policías también fueron víctimas de esas bandas, hay policías que no están en la corrupción, digamos en el aparato funcional, y se han ido sumando al pueblo, acompañándolo y actuando. Hubo una reacción fuerte, en la que varios bandidos han perdido la vida, más de cien en menos de cuatro o cinco días. Viendo eso, el primer ministro de facto Ariel Henry y ciertos estamentos internacionales, llamaron al cese de esa reacción popular”.
Esos factores de poder “están presionando sobre los policías para que abandonen las posiciones o el resguardo que daban a los puntos de vigilancia que habían asumido en los barrios. Ese accionar popular, acompañado por algunos policías, incluso ha llegado a liderar algunas zonas donde no hay más bandidos. Esto dividió las aguas”, señaló.
El activista haitiano precisó que ese parteaguas se está registrando “no solamente con respecto a la socialdemocracia y los sectores reaccionarios, sino en el seno de la izquierda haitiana. Hay un sector de la izquierda que dice que esto no puede ser, porque no podemos actuar igual que los bandidos. Se refieren a ´cortar cabezas, quemar cadáveres´, etcétera”.
“Si bien todos entienden la reacción aunque dicen que no es correcto actuar así, otros grupos de izquierda apuntan que eso va a ser peor, porque la venganza que van a tomar los bandidos va a ser tan grave, que va a quedar empequeñecido lo que ya estamos sufriendo”, aunque -cuestionó el vocero del Comité Democrático- “dicen esto sin ofrecer ninguna alternativa”.
“En cambio -destacó en ese sentido- hay otra parte de la izquierda que dice que sí, que habría que acompañar justamente al movimiento popular de reacción, e insertarse en ese movimiento, que tiene su propio nivel de organización, pero evidentemente no está dirigido por la izquierda. La izquierda puede intentar tomar la dirección, sabiendo que ese tipo de movimientos puede ser aprovechado por cualquier sector de la sociedad”.