“El país nunca tuvo un plan estratégico no solo para erradicar sino también para prevenir el trabajo infantil”, destacó la subdirectora de la Inspección de Trabajo.
Unos 40.000 menores de edad de entre cinco y 17 años trabajan en Uruguay, según el último Informe sobre Trabajo Infantil de 2024, presentado en setiembre de este año. La subinspectora nacional de Trabajo, Andrea Bouret, afirmó en diálogo con La Rosca, por M24, que la cifra “ocupa y preocupa” a las actuales autoridades.
“Está bien trabajar”, “está aprendiendo” o “el trabajo dignifica, aunque sea menor” son afirmaciones que fueron “naturalizadas” en la sociedad uruguaya, indicó la entrevistada. Uno de los asuntos que las autoridades identificaron en este marco es que los cuidados recaen en las niñas y adolescentes, inclusive desde temprana edad, precisó.
“Lo que queremos es quitar la idea de la culpa: cuando un niño o adolescente trabaja es porque atrás hay toda una familia que lo necesita, ahí hay mucho para hacer como Estado”, afirmó la jerarca.
A su vez, Bouret recordó que la edad de jubilación en Uruguay es cada vez mayor. Si las personas comienzan a trabajar a edades más tempranas, entonces “¿cómo llega nuestro cuerpo a esa jubilación?”.
El Comité de Erradicación del Trabajo Infantil está integrado por los ministerios de Trabajo y Seguridad Social, Salud Pública, Interior, y Educación y Cultura, Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, la Administración Nacional de Educación Pública, así como organizaciones sociales y empresariales.
Tras la divulgación de los datos, Bouret adelantó que este Comité elaborará un proyecto de largo plazo para abordar la temática. “El país nunca tuvo un plan estratégico no solo para erradicar sino también para prevenir el trabajo infantil”, destacó la jerarca. La primera tarea es analizar los datos para observar cuál es el vínculo entre el trabajo infantil y el ausentismo educativo, indicó.