Inmensa preocupación entre los docentes por las noticias que surgieron esta semana acerca del seguimiento a los celulares de docentes y estudiantes menores de edad del liceo 41 de Montevideo. El consejero del Codicen en representación de maestros y docentes, Julián Mazzoni, subrayó que preocupa el hecho de que cualquier persona que se oponga al Gobierno tiene que ser controlado.
Parece que todas las personas que tienen una posición crítica son “comunistas” y por eso tienen todo el derecho a “meterse” en el celular de docentes o incluso al de menores de edad. “Yo, escandalizado”, expresó Mazzoni en la entrevista central de Nada que Perder, el periodístico de M24 que se emite de lunes a viernes a partir de las 08:00 horas.
Para Mazzoni, este asunto tiene diversos planos. Recordó que su postulación y la de Daisy Iglesias fueron presentadas en la sede del PIT-CNT, central sindical que adoptó posición sobre el tema luego de conocerse el episodio de persecución y vigilancia al presidente de la organización, Marcelo Abdala.
Ahora se suma este episodio, con vigilancia sobre docentes sindicalizados. Y a esto, lo más alarmante, si aquello ya no es poco: hay involucrados menores de edad. La alarma, dijo Mazzoni, debe ser muy grande y las autoridades de la educación “debemos decir algo” y tomar medidas ejemplarizantes, consideró.
En ese sentido, informó a Nada que Perder sobre la próxima reunión del directorio, que se realizará este miércoles 8. “Lo plantearemos mañana", adelantó Mazzoni. El consejero conversó con la directora general de Secundaria, Jennifer Cherro. “Este tema es muy grave para la educación pública y para todo el país”, definió.
“Uno tiene la sensación de que cualquier celular puede ser intervenido”, declaró. El consejero añadió que, si se analiza la mentalidad de la intervención, preocupa tanto el hecho y como la justificación del mismo. “La idea de que cualquiera que genere problemas al Gobierno tiene que ser controlado, tal como dice esta persona y el jefe de los custodios de Presidencia… ¿los alumnos? Yo, escandalizado”.
Y rememoró los años 1973 – 1985: “yo viví la dictadura, fui perseguido, yo creo que hay que poner todo, si esto se naturaliza la caída de la democracia puede ser un tema, la educación juega un papel y lo que hagan las autoridades de la educación tiene que ser ejemplarizante”.
A Mazzoni no le cabe ninguna duda que Alejandro Astesiano es un “delincuente” que participa en una organización que debe ser desarmada. En este asunto, hay responsabilidades políticas que deben ser asumidas por todos, en el sentido de hacerse responsables de la reacción “porque tenemos claro que el esfuerzo de la educación pública es el esfuerzo por la democracia, democracia y educación están plenamente unidas”.
Por último, señaló que, si bien él no se comunicó con los padres y docentes afectados, sabe que están muy preocupados por el tema y buscan formas de que se investigue en profundidad.
Avance avasallante de la reforma educativa, contraria a la opinión de la mayoría de los docentes
Ahora empieza a dilucidarse en concreto la reforma educativa, expresó Mazzoni, porque al momento era todo discusión teórica. Fue muy crítico con la implementación de “mentores” para orientar a docentes e inspectores sobre la reforma. Para el consejero, ésta no es una figyura que genere condiciones para el funcionamiento, se parece más a una intervención desde la Gerencia de Planeamiento Educativo que afectará a docentes de aula y al equipo de inspección y dirección, porque van a dar línea sobre qué se puede hacer y qué no.
Pero los equipos de dirección y los inspectores son docentes de carrera con respaldo académico que conoce el sistema. Esto va a entrar en colisión, adelantó Mazzoni. “Los directores geenrales no deben estar cómodos con esto”, concluyó.
El propio concepto de “mentor” no aparece en ningún lugar de la organización educativa nacional y proviene del ambiente empresarial, dijo en la entrevista. Mentor, de la Odisea de Homero, hace referencia a la diosa Atenea cuando se disfrazó para poner a Telémaco en el ámbito social de la Grecia clásica. “Espero que no se crean dioses disfrazados y tengan una actitud más humilde de lo que se puede esperar por lo que se les plantea que hagan”, reflexionó.