Entrevistado en InterCambio el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, describió una perspectiva difícil para los trabajadores desde este fin de año por “la pérdida salarial” de públicos y privados y “porque se consolidaron normas que restringen los derechos de huelga, de piquete y de reunión”.
Pereira evaluó que “ha sido un año muy duro” y como ejemplo apuntó que “la tensión a que están siendo sometidos los trabajadores de la Salud es de un nivel increíble”. Y “a pesar de que el presidente de la República indicó como política de Estado (…) que todos (…) los que pudieran hacer trabajo a distancia (…) lo hicieran, en Primaria todos los maestros están yendo a trabajar los días administrativos” pese a que “todo el trabajo administrativo se hace a través de la plataforma informática llamada ´Gurí´, una decisión que nadie la puede explicar” aun cuando “la Presidencia dice ´lo mejor es quedarse guardado´”. Entonces “los maestros y auxiliares tuvieron un año muy tenso” pero “están yendo a trabajar todos estos días” aunque “no hay niños en las escuelas”, debiendo hacer “a veces un traslado departamental”.
Y “sumado a eso, un año de pérdida salarial”, con casos extremos como el del Frigorífico CLAY, un ejemplo “brutal; yo lo estoy diciendo en cada lado que puedo: éste es el manual del empresario que a nadie la gustaría tener en su país, en el medio de una pandemia hace un destrozo con los trabajadores, y obvio que genera circunstancias muy desagradables”.
El panorama es aún peor “si a eso le sumás una rebaja salarial en el sector privado (…) entre 3 y 4% y una rebaja en el sector público del orden de 5% en el año próximo”, ésta equivalente a “18 días menos” de trabajo, “como si el sindicato parara 18 días” pero extendida “a todos los públicos”, anotó.
Después “sumale la Ley de Urgente Consideración y todos los inconvenientes que vamos a tener para la recolección de firmas” debido a las restricciones de movilidad y reunión. Al respecto, Pereira puntualizó: “supongo que si el país fue capaz de modificar una elección del mes de Mayo al de Setiembre precisamente por la pandemia, (…) podrá prorrogar la fecha de entrega de firmas en función de la enormes limitaciones que estamos teniendo para hacer una reunión”. Adelantó que esto “lo voy a plantear en el Secretariado” de la central para que este lo proponga “a la Intersocial” y que esta, a su vez, lo plantee “a las bancadas parlamentarias” porque “hay que tener empatía y generar condiciones para que el tiempo sea mayor, porque esta no es una dificultad adicional, pone a nuestros compañeros en riesgo” y “el Poder Legislativo tiene que generar las condiciones” acordes a “un país democrático”. “Es un gesto democrático”.
Luego el entrevistado valoró la Ley aprobada por el oficialismo para posponer hasta el año que viene el goce de las licencias correspondientes a este año en el ámbito privado. “Para nada es un Proyecto que ayude ni al empresariado ni a los trabajadores, por el contrario”, lamentó, criticando que “es un gesto innecesario hacia el sector empresarial”, ámbito en el que “algunos lo utilizarán como utilizan todo lo que venga y otros más maduros dirán ´no, éste no es el modelo que conviene utilizar´. Porque las cosas van cambiando de lugar”, es decir que “esto no dura para siempre”, recordó.
Acerca de que pueda haber un cambio de las pautas salariales oficiales, razonó que “en una parte depende de nosotros”, es decir “cuánta fortaleza logremos acumular para que la negociación colectiva del año que viene” sea abordada por los sindicatos “con la mayor fortaleza posible”. Pereira lo vislumbra mucho más difícil en la órbita del Estado “porque no lo pueden asegurar” en el gobierno, indicó sobre “la recuperación del salario real”. Y “si esto es así, va a haber pérdida salarial”, aunque “también va a depender de nosotros, hay una articulación que los sindicatos tenemos que hacer”.
“Y por otro lado, se consolidaron normas que restringen el derecho de huelga, el de piquete y ésta que restringe el derecho de reunión, que será aparentemente por 90 días” pero igual, “como mínimo limita la libertad”.
Más adelante se refirió al tema de las iniciativas legales del oficialismo para intervenir en torno a las finanzas del movimiento sindical. “Todo el mundo dice ´no tenemos nada contra el movimiento sindical´ pero ya hay 3 proyectos de reglamentación sindical. Entonces el ´no tenemos nada´ tiene que estar demostrado en los hechos. El movimiento sindical recauda sus fondos de básicamente dos fuentes: el PIT-CNT de los sindicatos (…) en el entorno de 3.400.000 pesos por mes, una organización de 400.000 afiliados (…) y luego el Instituto Cuesta Duarte también recibe fondos sindicales y un fondo sobre la negociación colectiva del Inefop. No hay ningún fondo escondido, es una obsesión, la narrativa para generar la desconfianza, como les han hecho a otros sectores en el mundo y también en Uruguay”, anotó.
Por ejemplo, “el plan de vivienda sindical estuvo 6 años en las tapas de los diarios y cuando la justicia de alguna manera terminó el juicio y decidió que no había responsables en el movimiento sindical, en ninguno de los sindicatos y en ninguno de sus miembros, ni 6 minutos” de reproducción tuvo la noticia. “Es claro que hay una animosidad, no por todo el mundo, no por todo el sistema político” sino “de algunos sectores de la sociedad”.
Pero, matizó, “por otro lado hay una actitud del Ministerio de Trabajo para generar un Proyecto en consulta con trabajadores y empresarios sobre personería jurídica gremial que creo va en la dirección correcta”, resaltó.
Finalmente, el presidente del PIT-CNT cuestionó que “a todos estos anuncios” del gobierno sobre restricciones referidas al marco de pandemia, “claramente les faltó el ingreso básico de emergencia que cubriera la necesidad de 200.000 uruguayos que no tienen empleo”. “Es necesario que Uruguay tome políticas sociales compensatorias porque de lo contrario vamos a entrar el año que viene en una circunstancia muy difícil para un sector de la sociedad que ha tenido un año muy duro”, advirtió Pereira.
