Este miércoles, Estados Unidos implementó sanciones contra varios medios de comunicación rusos, incluyendo Rossiya Segodnya, RT, RIA Novosti, Sputnik, y Ruptly, en respuesta a lo que consideran “esfuerzos de influencia maligna” dirigidos a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció que diez individuos y dos entidades fueron sancionados, incluyendo altos ejecutivos de RT. Estas acciones se complementan con otras medidas del Departamento de Justicia, que ha imputado a dos empleados de RT por supuestamente promocionar contenidos que supuestamente buscaban “sembrar discordia y división” en Estados Unidos, y del Departamento de Estado, que ha designado a varios medios rusos como “misiones extranjeras”.
El director del FBI, Christopher Wray, declaró que estos intentos de manipular la opinión pública estadounidense “constituyen ataques a nuestra democracia”. Además, el Departamento de Justicia acusó a los trabajadores de RT de infringir la Ley de Registro de Agentes Extranjeros y de conspirar para cometer lavado de dinero.
El portavoz del Consejo Nacional de Seguridad, John Kirby, afirmó que “Putin estaba al tanto de estas acciones”, subrayando la gravedad de las acusaciones y la respuesta contundente del gobierno estadounidense.