“En agosto del año pasado salieron en redes sociales cuentas que denunciaban a varones violentos. Fueron especialmente tristes las denuncias que tuvieron lugar en el ámbito del carnaval, teatro y música”
“Muchas compañeras nos sumamos a trabajar y a pensar. En ese marco surgió la idea de generar el protocolo, una herramienta que permita la prevención y la acción, con un enfoque en la persona que es vulnerada en sus derechos”
“Nosotras empezamos a trabajar en el protocolo tomando en cuenta las normativas internacionales y nacionales”
“En relación a la cultura y del teatro, la informalidad de contratación y nocturnidad del trabajo son factores de riesgo”
“Hay una cuestión que figura como riesgo que es la cultura del ídolo, ha surgido a nivel internacional cuando se habló de directores famosos que han abusado. También en Uruguay pasó esto a nivel teatral. Es un medio pequeño y tenemos que protegernos entre nosotras mismas”
“Hay ciertas prácticas que hemos naturalizado históricamente en espacios de ensayo y funciones que nos dolían y dañaron siempre, pero no salían a la luz. El protocolo también ayuda a que hablemos del tema y podamos expresarnos sobre hechos inaceptables”
“Somos un sindicato, entonces el accionar solo puede tener que ver con personas socias del sindicato, no así la persona que denuncia. Las sanciones hablan de la suspensión o de la expulsión”
“La denuncia se tiene que hacer de forma personal en el sindicato, no hay formalidad en presentación de la denuncia, que puede ser por escrita o de forma oral”
“El sindicato tiene especialistas que estudian la situación e investigan, y se elabora un informe que se eleva al consejo directivo”
“La denunciante y el denunciado no se enfrentan nunca, no hay una especie de conciliación, se hace un acompañamiento psicológico a la persona denunciante. Por otro lado hay medidas y acciones de prevención y sensibilización”
“Ejemplificamos que la persona denunciante es mujer y el denunciado es varón, porque así es la mayoría de los casos. Pero el protocolo protege a todas las personas que pueden ser vulneradas en sus derechos”
“En el ámbito educativo también se aplica el protocolo, porque es un espacio de mucha vulnerabilidad. Cualquier alumna puede denunciar a su docente por situaciones de violencia. También el protocolo contempla denuncia de menores de edad”
“Históricamente se confunde la disciplina y exigencia con determinada violencia verbal e incluso física. Son patrones culturales que podemos ir desarmando, el trabajo no puede ser un lugar donde uno va a sufrir”
“Tenemos una tendencia a maternar los comportamientos de los varones ¿Por qué los hombres no se organizan y hacen sus talleres?”