Como cada 8 de Marzo, este miércoles se conmemora en gran parte del mundo el Día Internacional de la Mujer, nacido en una lucha obrera, marco en el que Nada Que Perder invitó a hablar del tema a Lourdes Peruchena, historiadora y escritora, y a Ana Laura de Giorgi, socióloga y politóloga.
De Giorgi destacó que “hoy es un día súper importante, nos adherimos al paro de mujeres, paramos todas las actividades, las productivas y las reproductivas; acá hay mucha discusión, si es un paro de conmemoración, de celebración, de lucha, los sentidos van cambiando a lo largo de la historia, a mí no me gusta que me digan ´feliz día´, en general”.
La renuencia a este tipo de saludo obedece a que “una de las cosas que denunciamos es el lugar subordinado que ocupamos las mujeres en la sociedad, en el orden de género; entonces no es un lugar para festejar, es un lugar para denunciar; entonces por eso rechazo esta idea del ´feliz día´”.
“Al mismo tiempo no tenemos que tener vergüenza de ser mujeres, y tenemos que estar felices y muy contentas de haber construido un movimiento feminista que hoy es el movimiento que tiene mayor capacidad de movilización en Uruguay, en América Latina, en el mundo occidental”.
Subrayó que “sin duda el movimiento feminista es lo que llenas las calles, es lo que construye la utopía, es lo que nos da las esperanzas de cambiar, del cambio social, eso también está bueno festejarlo; entonces un poco sí y un poco no, pero sobre todo es un día de lucha contra un orden injusto”.
Peruchena explicó que “tal vez el término conmemoración sea adecuado en el sentido de su conformación, es decir, ´hacer memoria con´; se trata de aprovechar ese día para eso, para hacer memoria con, para juntarnos”.
“Y fundamentalmente, es hacer memoria, que implica hacer presente, porque el presente se construye de memoria, de acciones pasadas, y de proyectos, y de luchas pasadas, que fueron dando base a lo que nosotras podemos hacer en el día de hoy, hubo muchas de nosotras antes para que nosotras pudiéramos estar hoy acá y hacer uso de estos micrófonos”.
“Entonces ese conmemorar, hacer memoria con, debe vincularse con la idea de compasión en ese mismo sentido, apasionarse con, con la idea de conmover, mover con; se trata de llamar a las mujeres, y llamar a los varones también, y llamar a la sociedad en general”, indicó Peruchena.
De ahí que la idea sea “poner sobre la mesa ´aquí estamos, éstas somos´, y durante la historia hemos sido no poco vistas, al contrario, a veces estamos demasiado visibles, sino no oídas; (…) el tema no es de invisibilidad sino de inaudibilidad; los códigos que cada sociedad, comunidad, cada unidad adopta para escuchar, para dar paso al logos, a la palabra, vienen pautados, determinados, se afirman y se confirman de parte de los varones”.