A la gremial que nuclea a las mutualistas le interesa conocer la forma en que se costeará la alta demanda asistencial que se instaló luego de la pandemia.
Este lunes los representantes de la Coordinadora Nacional de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva (Conaiamc) mantuvieron un encuentro con la ministra de Salud Pública, Karina Rando, para plantearle algunos temas sobre el Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS), la situación actual de los prestadores y las diferencias de las demandas pre y pospandemia.
Desde las empresas privadas de servicios médicos se advirtió que existe una alta demanda de pacientes que requieren asistencia, lo cual impacta en la calidad del servicio y por ende incrementa los costos de las prestaciones.
Daniel Porcaro, coordinador de las instituciones de asistencia médica, dijo a la prensa que luego de la pandemia hubo un cambio en la demanda y sobre todo un aumento de los test diagnósticos, un 20% por encima del 2019.
En esa línea, comentó que, por ejemplo, en tomografía se produjeron 204 mil en el 2019, mientras que luego de la pandemia se realizaron 248 mil.
Recordó que durante la pandemia la producción asistencial se redujo alrededor en promedio de un 13% y al año siguiente el efecto rebote fue de un 31%.
"Estamos notando que hay un incremento de los test diagnósticos de entre un 20% y 30% incrustados en el sistema, pasó a ser la normalidad", explicó.
Y agregó: "tenemos que estar muy finos al momento de hacer los cálculos, porque las instituciones no están en condiciones de llegar a tener déficit en cualquiera de esas prestaciones".
Por otro lado, Porcaro aclaró que cuando el MSP realiza anuncios en salud mental, los prestadores "tenemos que dar respuesta". "Están muy bien las modificaciones propuestas, pero ya con las prestaciones que damos tenemos un déficit de 7 millones de dólares anuales", consideró.