Fue operada por tercera vez la niña que fue baleada mientras acribillaron a su padre de 22 años. Pero los médicos advirtieron que el riesgo aún es “altísimo” y, si sobrevive a la operación, quedará parapléjica.
La respiración y la circulación sanguínea mejoran. Pero, en caso de que sobreviva la niña de 2 años baleada este lunes 6 en el barrio Nuevo Ellauri de Montevideo, quedará parapléjica.
Al llegar al Hospital Pereira Rossell presentaba 15 orificios de bala, informaron El País y El Observador.
La tercera operación sirvió para finalizar el tratamiento sobre el abdomen, tras confirmar que ya no hay más lesiones.
Quedó una bala en la pelvis, tiene fractura de fémur y una lesión medular, lo que provocará que quede parapléjica, en caso de sobrevivir.
Como tuvo un paro cardíaco, se desconoce si tiene lesiones neurológicas, informó el País.
Según el mismo medio, los médicos del Hospital Pereira Rossell no recuerdan antecedentes de un caso de tal magnitud en una menor de edad.
Rodrigo Nahuel Pintos Dorta fue el autor de los disparos que mataron al padre de la niña, un hombre de 22 años con antecedentes. El matador utilizó un arma marca Glock con el cargador modificado, pues carga 17 balas. Se detectaron municiones oficiales del Ministerio del Interior.
