La inflación en nuestro país es inusualmente baja en estos meses, menor al 4%, esperándose que suba al entorno del 5% hacia fin de año y que crezca más de otro punto durante 2024 hasta ubicarse “por arriba del 6%”, señaló la economista Alejandra Pico, del equipo del Instituto Cuesta Duarte del PIT-CNT, en INFO 24.
Pico explicó al respecto que “desde setiembre del año pasado el rango-meta de inflación se ubica entre 4 y 6%; previamente había estado entre 3 y 7% por muchos años, aunque en la mayoría de esos años no se cumplía, pero se trata de una meta política”.
Ahora, “finalizado el mes de setiembre la inflación se ubica en 3,89%, y este es el dato interanual, el que se suele mirar cuando se la analiza”; se trata de “un porcentaje sorprendentemente bajo para la economía uruguaya, que hace un año tenía una inflación mucho más cercana al 10% y que está acostumbrada a variaciones en los precios al consumo que son más o menos del doble”.
En esa significativa disminución incidió “una cantidad de variables”, entre ellas “factores externos a la dinámica de la economía que explican la evolución de los precios” internos como “los precios internacionales de algunos productos importantes para nosotros”, tal el caso “del petróleo”, que se compra afuera.
“También son importantes los precios de algunos productos que exportamos, como los alimentos: la carne, los lácteos, el arroz, que se fijan en los mercados internacionales, y el precio local, en definitiva, también depende de factores internacionales”, anotó.
“Por este lado, justamente, hoy estamos recibiendo presiones no tan fuertes” al alza o bien “esos precios en algunos casos han caído, (…) por ese lado vemos como un afloje en la suba”.
“Lo mismo sucede con los precios de las frutas y verduras, que en Uruguay dependen más que nada de factores climáticos, son los únicos precios que así como suben también bajan; hoy estamos recibiendo presiones a la baja del lado de esos precios, que además tienen una incidencia fuerte en la canasta de consumo”.
“Y también vale decir que el Banco Central ha llevado adelante una política de suba de tasas de interés en pos de alcanzar una menor inflación” enfriando la economía; “todos estos factores han jugado a que la suba de los precios de los bienes de consumo hoy se ubiquen en esos rangos que son bajos para nuestro país”.
La economista del PIT-CNT resumió que “es una buena noticia entre otros factores porque una menor inflación hace por ejemplo que con los mismos ajustes salariales, el salario real termine siendo mejor que si tuviéramos niveles de inflación más altos”.
Hacia el futuro inmediato “la Encuesta de Expectativas que releva mensualmente el Banco Central entre varios analistas económicos muestra que para el cierre de este año” habrá “niveles de inflación un poco más altos, en el entorno del 5% (…) y para el año que viene ya vamos a estar de vuelta por encima del rango-meta” aunque “más bajos que los que teníamos, “por arriba del 6%”.
Por lo tanto “no es esperable que niveles tan bajos como los que tenemos hoy se mantengan” durante el resto de 2023 y en 2024.