Como siempre pasa en la negociación colectiva, dijo el exministro Daniel Olesker, entre los lineamientos del Poder Ejecutivo y la realidad está la lucha sindical, la única que puede cambiar las proyecciones del Gobierno sobre el incremento del poder adquisitivo que, en cifras oficiales, será igual al año 2019, es decir, un aumento de 0% en cinco años.
Si se confirma la meta del Gobierno, los aumentos definidos en la última ronda de los consejos de salario para estos cinco años serán solo para recuperar lo perdido, reflexionó el exministro frenteamplista, Daniel Olesker, en diálogo con Nada Que Perder (lunes a viernes desde las 08:00 horas).
Pero estableció que, “como siempre pasa, entre lineamientos y realidad está la lucha sindical y capaz que aumenta un poquito más que cero”, adelantó.
En la charla precisó que ya existen sectores de la actividad económica uruguaya que recuperaron el poder de compra perdido en estos últimos tres años. Entre ellos, la construcción, el sector de la bebida o la salud. Por tanto, esto hace imposible que estas ramas de actividad firmen convenios sin aumentos, como ocurrió con la construcción.
Pero en una economía que crecerá entre 8 y 9% en el lustro y un empleo que aumentará un 4%, está claro que los salarios van a perder participación en la riqueza nacional, dijo Olesker.
Lo otro que va a pasar es que los que van más retrasados en la recuperación de su poder de compra serán los salarios más bajos, lo que acelerará la desigualdad entre los ingresos más bajos con el resto. A esto se suma la menor participación del gasto público social en el pbi nacional, gasto que es utilizado por estos mismos sectores. Cuando culmine este quinquenio el sector salarios y jubilaciones medias, medias bajas y bajas, serán los más perjudicados, tanto formales como informales, anticipó el entrevistado.
Mientras, la ganancia está en aumento. Olesker recordó los datos estimados por Fernando Isabella sobre los 1.000 millones de dólares en transferencias desde los sectores dependientes hacia los empresariales.
Y además, tienen más beneficios dentro de este grupo, con claros ganadores: la producción perdió ante el sector financiero, los vinculados al mercado interno también perdieron. Y esto se debe, finalizó el economista, porque las empresas más grandes ganaron más debido a que tienen dos formas de apropiarse de la riqueza: por exportación y por formación de precios.