Ruglio evitó hablar de incidentes y Fuentes minimizó la grasa en la tribuna Scarone

Los presidentes de los grandes hablaron tras la victoria clásica de Nacional frente a Peñarol por 3 a 1 que no estuvo exenta de incidentes en las tribunas.

El presidente de Peñarol, Ignacio Ruglio, publicó un mensaje a través de WhatsApp en el que pidió “disculpas” a los hinchas por la dura derrota, pero en el que evita pronunciarse sobre los incidentes en la Tribuna Scarone a la que concurrió y en la que se desplegaron dos banderas alusivas a la muerte del barrabrava tricolor Washington Simón (“el gordo Washi”) y un muñeco similar a la gallina inflable con los colores de Nacional, exhibida en varias oportunidades.

“Van a ser días de sentir mucha vergüenza, mucho dolor y de sentir que ninguno de nosotros estuvo a la altura de lo que nos jugábamos (…) como decían nuestros viejos jugadores, cuando se pierde un clásico hay que tener vergüenza hasta de andar en la calle y así debe seguir siendo Peñarol”, indicó el mandatario aurinegro.

“2200 hinchas que pagaron su entrada y dedicaron 8 horas de su domingo para alentar al equipo. Perdón a la gente y a laburar el doble hasta dar vuelta esto. Las buenas ya van a volver”, cerró Ruglio en su estado de WhatsApp.

En la previa del partido, el presidente aurinegro se había referido en diálogo con Telemundo a que varios sectores de la tribuna de Peñarol -paraavalanchas y alambrados- fueron cubiertos por grasa en la previa del encuentro, lo que generó malestar en la parcialidad visitante, que luego la utilizó cómo combustible para prender fuego parte de la tribuna. Ruglio denunció que varios hinchas sufrieron heridas tras resbalarse.

El presidente de Nacional, José Fuentes, indicó en declaraciones a Sport 890 que “el inflable no irritó tanto como la bandera haciendo alusión a un fallecido hincha de Nacional”, que “desató la ira de los hinchas, que muchos se trasladaron de una tribuna a otra” y comenzaron a arrojarle piedras a los parciales aurinegros.

Opinó que “el operativo fue exitoso” porque “no hubo ningún lastimado” y atribuyó los incidentes a “100 personas pararon el espectáculo porque ahí adentro se sienten los dueños, y no hay forma de parar eso si no es por represión”.

Luego minimizó la colocación de grasa en varios sectores de la hinchada visitante previo al juego. Admitió que “algunas barandas y algunas columnas” estaban engrasadas, “pero no creo que eso sea un hecho tan grave”.

Indicó que “aparentemente” ocurrió en la mañana del domingo, y explicó que un grupo de hinchas concurrió a repintar la tribuna “porque lo que hicimos fue preocuparnos de que no haya ninguna consigna agresiva para generar un hecho de violencia”. “Si después alguien se metió y puso esa grasa, no sé cómo lo hicieron”, admitió.

Hinchas aurinegros también denunciaron a través de redes sociales que el periodista Martin Sarthou, responsable de Comunicación de Nacional, realizó gestos provocativos hacía la parcialidad visitante.

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