La situación escaló y algunos jugadores de la selección intervinieron a las trompadas limpias contra hinchas colombianos.
Terminó el partido entre Uruguay y Colombia, y como en toda semifinal de un torneo como la Copa América, el vencedor celebra con entusiasmo.
Los cafeteros ganaron por la mínima y se metieron en la final que disputarán contra Argentina el domingo 14 de julio.
Pero la situación no siguió con festejos. A la alegría colombiana y la tristeza uruguaya, se sumó la violencia de un grupo de hinchas colombianos sobre los familiares de los jugadores de la Celeste.
Esto siguió con la intervención de algunos jugadores uruguayos, a las trompadas debajo de la tribuna principal, con el grupo de hinchas desacatados.
¿Y la seguridad? Bien, gracias. Al término del partido, como suele ocurrir, un jugador por equipo habla "en caliente" con un periodista de la transmisión central. Por Uruguay lo hizo su capitán, el zaguero Josema Giménez.
El defensa se despachó contra la organización que no evitó el ingreso de personas con "algunos traguitos" y violentaran el escenario deportivo.
Esto dijo: "Dejame decirte una cosa porque sé que te quieren cortar, que por favor tengan cuidado porque las familias están en las tribunas. Nos hicieron una avalancha a todas nuestras familias. Fue un cierto sector de Colombia y no nos dejan hablar en el micrófono. Lo puedo decir porque si no te cortan. Esto es un desastre. Tuvimos que ir a la tribuna a sacar a nuestros seres queridos, con un bebito recién nacido. No había un solo policía, cayeron a la media hora. Nosotros ahí dando la cara por los nuestros. Ojalá que los que están organizando esto, tengan un poco más de cuidado con la gente, con la familia, con los alrededores del estadio, porque todos los partidos pasa lo mismo. Nuestras familias están sufriendo por culpa de dos o tres que se toman unos traguitos de alcohol y no saben tomar, que se comportan como unos niños y no se comportan en forma decente".