"Lo que ha cambiado en los últimos años es que Uruguay ha pasado a ser cada vez más frecuentemente asociado también a redes de macrotráfico: grandes embarques que llegan al país por la hidrovía y son luego exportados hacia puertos principales de Europa", explicó el politólogo Luna.
Este jueves Nada Que Perder de M24 dialogó con el doctor en Ciencias Políticas, Juan Pablo Luna, docente de la Universidad de Carolina del Norte y profesor titular del Instituto de Ciencia Política y Escuela de Gobierno de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Con el también politólogo Andreas Feldman escribieron “Política criminal y desarrollo fallido en la América Latina contemporánea”, una investigación en la que resolvieron analizar el desarrollo del crimen organizado y el narcotráfico en Paraguay, Perú, Chile y Uruguay.
Luna relató que estudió los casos de estos países porque "son de los que se habla poco en la literatura comparada respecto al crimen organizado en América Latina y a nivel global".
Dijo que si bien Paraguay y Perú son productores de drogas, hay poca información sobre cómo funcionan, además de que generan poca violencia, por lo cual no ha sido de interés para la Academia.
Si bien Chile y Uruguay no son países productores, sino "puertos de paso" o "cabos pequeños de consumo interno", nuestro país tenía una "literatura especializada en el rol histórico de lavado de dinero". "Son dos países sobre los que se suponía tenían antídotos institucionales que de alguna manera los aislaban o los protegían de la expansión del crimen organizado", señaló.
Sin embargo, consideró que estos dos países, al igual que Costa Rica, muestran en los últimos años problemas vinculados a la expansión del crimen organizado y de los mercados ilegales que atraviesan América Latina.
Consultado respecto a si el lavado de activos sigue siendo el elemento de la cadena del narcotráfico que más se destaca en Uruguay, indicó que nuestro país tiene problemas con el microtráfico y sobre todo a nivel de espacios de marginalidad urbana y no sólo en la periferia de Montevideo sino también en algunas zonas del interior como San Carlos, Minas, Rivera.
A la vez, sostuvo que Uruguay cumple un rol importante en el mercado del lavado de dinero regional, como plaza financiera de Argentina.
"Lo que ha cambiado en los últimos años es que Uruguay ha pasado a ser cada vez más frecuentemente asociado también a redes de macrotráfico: grandes embarques que llegan al país por la hidrovía y son luego exportados hacia puertos principales de Europa. También hay una ruta africana desde el puerto de Montevideo. Yo no diría que Uruguay es puerto de paso, diría que es más bien hoy un centro de acopio regional, un hub logístico de rutas por donde pasa mucha droga que está siendo crecientemente demandada por mercados europeos, asiáticos", detalló.
Luna explicó que esta situación responde a una "geopolítica de los mercados ilegales" que se están moviendo más rápido e inteligencia, cuentan con más recursos que los Estados que tienen que enfrentarlos.
"Todos los países tienen debilidades. El punto es en qué medida se mira para el costado o eventualmente se empieza a corromper la institucionalidad", acotó.
Sin embargo, aclaró que si bien Uruguay es un mercado chico, tiene ventajas competitivas para ese negocio como un sector de logística desarrollado, la conexión con la hidrovía, cielos abiertos.
Mientras que a nivel regional se ha desplazado la producción de droga y la logística hacia el sur del continente, como respuesta del "efecto globo" es decir como consecuencia de la política de Estados Unidos en Colombia, en Centro América a través del Plan Mérida.
A esto se suma el terreno que ganan las bandas criminales brasileñas "como operadores fundamentales del mercado global" que están asociados a grupos mafiosos europeos, además de ser relevantes en el pasaje de grandes embarques que pasan por Uruguay.
En cuanto a la debilidad de Uruguay que permite actividad de lavado, relató que existe un pujante mercado del sector construcción, como el hub de Punta del Este, "referido en la literatura especializada como un centro importante para operaciones del lavado", no solo asociadas al narcotráfico sino también al capital argentino fugado de su economía.
"La principal debilidad de Uruguay, en ese sentido, tiene que ver con que el sistema político ha sido bastante impermeable a las advertencias que se han ido haciendo sobre este tema, las advertencias que se han hecho sobre el financiamiento en la política. Uruguay, por un lado es destacado por la calidad de su sistema político, la resitencia de sus partidos a un contexto por el cual los partidos están en crisis en todo el mundo, pero por otro lado son partidos cuyo financiamiento no conocemos bien", añadió.
En este sentido opinó que ello ocurre porque a nivel de las élites políticas consideran que "acá nos conocemos todos y esto no pasa" y también reveló cierta negligencia de los partidos políticos "en términos de tomarse en serio la transparencia del sistema".
Pese a que Uruguay registró avances en los últimos años sobre vigilancia del lavado, "es evidente que con la LUC y parte de las modificaciones legales que se hicieron se vuelve a facilitar actividades de lavado del país, en un contexto en el cual por el secreto bancario, por la estructura que el país permitía respecto a las sociedades anónimas, por cierta especialización de la plaza financiera uruguaya de estudios de abogados uruguayos que han ejercido este rol para capitales internacionales".
También se refirió al crecimiento económico y bienestar que genera el narcotráfico, ante lo cual el sistema político mira hacia el costado, salvo que intermedie la violencia que pueda generar costo electoral.
"Uno no puede entender la dinámica económica de América Latina hoy sin la presencia de estos capitales y actividades que suplementan y se imbrican con la actividad económica legal. Tanto Paraguay como Perú están dentro de los países que más han crecido económicamente en los últimos 15 o 20 años en la región. Sin embargo, ese crecimiento no es todo legal. Ahí hay una dinámica de los mercados ilegales, informales y legales que se retroalimentan", puntualizó.