Viñas planteó que la discusión pública se ha construido sobre datos inexactos que habilitan obras “faraónicas” sin antes corregir el funcionamiento básico de la red de agua potable.
El activista ambiental Raúl Viñas, integrante del Movimiento por un Uruguay Sustentable (Movus), explicó en Info24 la propuesta “Agua para Montevideo”, un documento enviado al Parlamento con alternativas para mejorar el suministro de agua potable en el área metropolitana. El diagnóstico combina observaciones técnicas, denuncias recibidas y un análisis de los consumos reales del área metropolitana.
En la entrevista, Viñas planteó que la discusión pública en torno a este asunto se ha construido sobre datos inexactos que habilitan obras “faraónicas” sin antes corregir el funcionamiento básico de la red. Para fundamentar su postura, insistió en que el problema principal no es la capacidad de producción sino las pérdidas, los controles y las “falacias” instaladas sobre el consumo de agua.
Viñas comentó dos afirmaciones centrales que cuestiona el documento: “Se dice que OSE pierde el 50% del agua, lo cual ya de por sí sería vergonzante”, y sumó una segunda, según la cual que "Montevideo consume 600.000 m³ de agua por día”. Para el entrevistado, ambas cifras distorsionan la realidad y justifican decisiones de inversión que no responden a las necesidades del sistema.
En este marco, el ambientalista se refirió a las desigualdades que existen entre el área metropolitana y resto del país en cuanto a las pérdidas de agua. “Cuando mirás Montevideo, las pérdidas son del 65%, no 50%, muy lejos del 30% que OSE mismo tiene en el interior del país”, puntualizó. Según explicó, esto supone que buena parte del agua potabilizada se desvía sin destino claro o se pierde por fallas estructurales.
Con respecto al dato que indica que en Montevideo se consumen 600.000 m³ diarios, señaló que eso implicaría “un poco más de 300 litros por habitante”, el doble de lo que establece Naciones Unidas y muy por encima de lo que marca la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua: 90 litros en invierno y 150 en verano. “De esos 300 litros, 200 no se sabe a dónde van y solo los otros 100 la OSE los termina facturando”, dijo, y afirmó: “Le estamos pidiendo al río Santa Lucía más del doble del agua que verdaderamente consumimos”.
“Hacer las cosas bien es tener control”, remarcó el entrevistado, que puso el foco en consumos no contabilizados y denuncias recibidas por el movimiento. “Lo que no tan elegantemente le podríamos llamar hurto de agua”, expresó. Viñas mencionó casos denunciados a Movus por vecinos, desde lavaderos hasta grandes industrias, aunque aclaró que no siempre existen pruebas verificables.
Para Viñas, si las inspecciones se hicieran correctamente no serían necesarias las “faraónicas obras” planteadas en las distintas administraciones para el suministro de agua potable en el área metropolitana. “No necesitamos una nueva potabilizadora”, afirmó al analizar la iniciativa de construir una planta adicional en Aguas Corrientes que agregaría 200.000 m³ diarios. Según dijo, la capacidad existente es suficiente si se reparan las redes y se reducen las pérdidas.
Desde su punto de vista y el de Movus, tampoco se justifica la construcción de la represa de Casupá prevista por el actual gobierno. “Analizando el sistema en forma adecuada, no sería necesaria”, afirmó. En ese sentido, reiteró que la solución pasaría en gran medida por “arreglar el sistema interno”, que implica reparar las pérdidas antes detalladas.