A dos meses del cambio de mando en Colombia, Luis Lacalle Pou visitará de forma oficial a Iván Duque el 30 de junio y al momento no tiene agendado un saludo al próximo mandatario, Gustavo Petro. “Quizás la visita terminará siendo un problema desde el punto de vista diplomático”, criticó el senador frenteamplista Daniel Caggiani.
Lacalle Pou tiene un cúmulo de acciones indebidas en materia de política exterior que, en un principio, el senador adjudicó a la inexperiencia y falta de asesoramiento del mandatario en diplomacia pero, con tantos desaciertos, Caggiani consideró que es un estilo de hacer política. Para el senador frenteamplista, las acciones diplomáticas de Lacalle Pou son un cambio de rumbo de la tradición uruguaya en política exterior.
En referencia a la reunión con Iván Duque, actual presidente colombiano a quien Lacalle Pou visitará la próxima semana, Caggiani dijo que se reunirá con un presidente que el 7 de agosto entrega el poder a Gustavo Petro, pero al momento no hay información sobre un encuentro con el próximo presidente.
“Quizás la visita terminará siendo un problema desde el punto de vista diplomático”, reflexionó Caggiani en Menú Informativo. Para el parlamentario, una visita oficial de Lacalle Pou a Duque, que tiene poco más de dos meses como presidente, es otro ejemplo de política exterior basada en ideología, algo que criticaba cuando era opositor.
“Nuestro presidente se ha especializado en poner el dedo en la colmena en materia de relacionamiento bilateral” con Argentina, en referencia a la reunión que el mandatario uruguayo mantuvo con el jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, uno de los principales opositores al actual gobierno argentino, señalado como posible precandidato a la presidencia. “Quizás se está pensando más en intereses políticos electorales que no contribuyen al buen relacionamiento entre los países”, consideró.
TLC con China: de los grandes anuncios a ningún resultado
Acerca del tratado comercial con China, Caggiani recordó el sinceramiento del Gobierno en febrero, cuando el ministro de Relaciones Exteriores, Francisco Bustillo, dijo en el Parlamento que no hay avances sustanciales y expiraron los plazos establecidos con China para la presentación de un estudio de prefactibilidad.
“De aquellos grandes anuncios de setiembre, no han habido más que excusas para culminar un proceso que, sin dudas, es el más sencillo y menos engorroso, que es hacer un estudio de factibilidad para ver si las economías tenían convergencia”, algo que no debería tener dilaciones porque Uruguay es exportador de alimentos hacia China.
Recordó que Uruguay fue uno de los primeros países en acercarse al proyecto “Una franja una ruta”, para acceder a inversiones en infraestructura o la construcción de una agenda para perseguir los Objetivos de Desarrollo del Milenio, pero Uruguay no hizo nada en ese sentido.
Tampoco se sabe mucho del anuncio con Turquía, ni otros grandes acuerdos que se iban a firmar para salir del “corset” del Mercosur, rememoró Caggiani. “No se ha visto nada, han quedado las serpentinas y los globos de colores desinflados”, ironizó.
